¿Quién eres? ¿Por qué llegas así? Tal río crecido arrasando todo ¿Quién eres? No dejas espacios ni brechas terriblemente imposible tratar al menos de olvidarte ¿Quién eres mujer? ¿Que punto de infinita fuerza del universo llevas en ti? Entonces, entonces inúndame arróyame con tu delirante y mágica forma de amar, loco,
loco estoy y ante ti, rendido.
Lҽɳι
Soy río que sale de su cauce y mis versos el fluido del caudal que irrumpe en tu remanso.
En deleite contemplas el afluente crecido e ineludible, sumido ante el vigor que se refleja en el juicio de tu mirar te dejas arrastrar por la corriente.
Y me pregunto, ¿Será de piedra la represa que con ansias me espera?.
Camilo
Aquí estoy en embeleso esperando te unas a mis aguas y te recibo con los ojos cerrados despojado de corrientes pasadas o estragos, me entrego a ti, me entrego a ti y te digo Llévame en tu cauce al mar o la ribera, tú, que eres poesía infinita llévame con tus palabras llévame amor mío, por amor, no me sueltes.
En tu corazón de inmenso amor o con el suave bálsamo de tus palabras acaríciame mujer, quiero que te aferres a mí como me aferro de ti, Así, con la misma fuerza que llegaste reguemos de futuro los campos para que florezcan aquilegias, nuestras aquilegias Lo harán para nosotros.
Lҽɳι
En las tierras bajas del valle pálido las aguas enajenadas precipitarán las semillas del amor, y retumbará en el cielo el eco de un cántico que arrullará las noches del suelo fresco.
Florecerán cada primavera como el cielo azul las nubes blancas o el púrpura de mis labios, cuando llegue el frío invierno y el tallo se torne delgado se aferrarán al suelo con las garras de águila.
Que sublime es despertar con la ternura de tus besos y el deseo crujiendo en la ventana haciéndome sentir, más que deseada… Querida, amada. En tu regazo, el sol se desborda de caricias Los besos nacen en la frente y van recorriendo la piel, tan suave como el roce de una pluma que danza en el aire canciones de amor.
Tú, eres amor, sin necesidad de pronunciar la palabra Eres alma, eres fuego, magia y pasión Eres el lirio que acoge el jardín de mi edén para florecer, anunciando el alba.